El gallito de las rocas o también llamado Tunqui es sin duda una de las aves más bellas y fascinantes del mundo. Su colorido plumaje e imponente despliegue para el cortejo, lo consagra como una de las aves más pintorescas y apreciadas de la creación.
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Hábitat del Gallito de las Rocas
El habitad natural de esta hermosa ave se encuentra entre los 1.400 y los 2.500 metros sobre el nivel del mar, en las zonas conocidos con el nombre de Yungas, generalmente es avizorado en los bosques húmedos y espesos de los países de Perú, Venezuela, Ecuador y Colombia. La humedad y clima tropical de estos bosques son el ambiente ideal por la abundancia de frutos que crecen en dichos lugares y facilitan la alimentación del gallito de las rocas en cualquier temporada del año.
Características
El gallito de las rocas, es una ave mediana de aproximadamente 32 a 35 cm de altura, quién como sucede en la mayoría de las aves, se diferencian de la tonalidad del color de su plumaje por su género. De acuerdo a ello, el gallito de las roca macho tiene un bello color rojo anaranjado, con una cresta firme de plumas sobre su pico y la frente, alas y colas de color negro, además de algunas plumas de color gris perla en las alas. Mientras que el hembrea, se caracteriza por un color marrón rojizo oscuro en la mayoría de su plumaje y tiene la cresta más pequeña.
Sin embargo, esta maravillosa especie, pese a contar con protección legal y ser declarada primera ave nacional del Perú, se encuentra en peligro de extinción a causa de la caza indiscriminada y la depredación de los bosques trópicas que habita, debido a la tala ilegal.
De igual modo, te contamos que su nombre científico es en realidad, Rupícola peruviana, por ser considerada ave nacional del Perú. Asimismo, no es el único nombre que ostenta, es también muy conocido como tunqui, que proviene del vocablo quechua tunki.
¿Cómo podemos distinguir al gallito de las rocas?
Además de su hermoso plumaje de diversos colores que derrocha esta ave peruana. Esta especie de ave tiene un notorio dimorfismo sexual, el macho es completamente diferente que la hembra, tanto en color de plumaje, como también en comportamiento silvestre.
Lo que más sobresale es la cresta que se encuentra desplegada de forma permanente, en el caso del macho, la cresta es más alta y larga, y es uno de los atributos más visibles que lo distingue de la hembra.
El gallito de la roca suele vivir en zonas de montañas muy escarpadas y tienen la costumbre de ocultarse entre las rocas, de allí deriva su nombre. A raíz de esto, avistarlos es muy difícil. La mayoría de veces son avistados cuando están en pleno vuela a gran velocidad y demostrando mucha destreza, lo cual es también uno de sus atractivos.
Curiosidades del gallito de las rocas
El cortejo previo a la reproducción
En primer lugar, tenemos que empezar señalando que el gallito de las rocas es un ave gregaria o hogareña, al cual le gusta quedarse en comunidad a vivir en el mismo sitio donde nació y también es un ave polígama. Cuando su temporada de reproducción inicia es una ave que puede pasar todo el día trepado en los árboles, donde son los machos que realizan una danza, dando pequeños saltos y produciendo sonios con el fin de atraer a las hembras y llevar a cabo la actividad reproductora. El cortejo del gallito de las rocas es un gran espectáculo de gran despliegue y aleteo colorido de su plumaje.
Cuando una hembra es atraída por un gallito de las rocas macho, ella se acerca a donde se encuentra el macho para copular, mientras el resto del grupo sigue bailando y esperan ser elegidos por las demás hembras, quienes continúan expectantes tratando de elegir. Asimismo, los sonidos o chillidos que producen se pueden percibir a gran distancia en medio de la selva profunda.
De igual modo, es importante mencionar que el proceso de cortejo y la elección de un macho por parte de una hembra, puede tomar días, y son los gallitos de las rocas machos quienes se lucen y exhiben todas sus cualidades de cortejo con el fin de atraer a una hembra. Este procedimiento o actividad también se ve marcado por una formación social de jerarquía, pues es el macho dominantes quien se apropia de un territorio circular, ubicándose el al centro, y los demás machos lo rodean. De este modo, el gallito de las rocas macho dominantes es el primero en aparearse con una hembra.
Está evidenciado por diversos estudios y método experimentales que han sido reunidos por muchos biólogos, que la reproducción del gallito de las rocas empieza en el mes de Octubre y finaliza con la incubación de los huevos que tiene lugar durante los meses de Noviembre hasta Febrero.
Al culminar el proceso de apareamiento, es la hembra quien de forma individual cuida del huevo y la posterior cría. El tiempo de incubación es de aproximadamente 42 días y por un periodo de tres meses como mínimo, los pichones no se despegarán de la madre, antes de dar sus primeros aleteos.
Sus depredadores y amenaza humana
Como toda especie natural y considerando la inevitable cadena alimenticia natural, el gallito de las rocas también se ve amenazado por diferentes depredadores naturales. Sin embargo, también corre riesgo por las actividades del ser humano, quienes por fines lucrativos o desconocimiento, se empeñan en destruir los ecosistemas naturales que habitan, además de los cazadores furtivos que se lanzan en su cacería para comercializarlo sin pensar en el gran detrimento que causa a la especie y a la naturaleza en general.
Entre sus depredadores naturales están el Ocelote, al Águila Monera, el Busardo negro Urubitinga, el Águila crestuda, el Busardo Blanco, el gavilán bicolor, las serpientes, el Puma, el Halcón montés collajero, el Jaguar, el coatí y los hurones.
Ocelote – depredador natural del gallito de las rocas
En territorio peruano se encuentra en varias áreas protegidas como los parques nacionales (Río Abiseo, San Martín; Yanachaga – Chemillén, Pasco; Tingo María, Huánuco; y Manu, Cusco – Madre de Dios). También se le encuentra en vanos bosques de protección (Alto Mayo, San Martín; San Matías – San Carlos, Pasco; y Pui-Pui, Junín).
El gallito de las rocas o tunqui es el ave nacional del Perú y cuenta con muchas leyes en su defensa. Sin embargo, su caza y comercialización no se detiene, personas sin escrúpulos hacen caso omiso a las disposiciones y esta especie es capturada por traficantes, para su venta, vivo o disecado. Es fundamental que generemos una cultura de concientización en la población y reconozcamos la importancia de proteger nuestras propias especies naturales.
De igual modo, la protección y conservación del gallito de las rocas puede generar importantes inyecciones de dinero a través de los turistas que visitan las zonas donde se encuentra para contemplarlo, y de esa manera contribuir en mejor la economía y calidad de vida de los pobladores locales mediante el auge de servicios turísticos.
